Güeros // Reseña

 

Güeros es una película mexicana del director Alonso Ruizpalacios con elementos de drama, comedia y road movie. Todo inicia cuando el hermano menor de un "nini" va a su departamento y transforma la rutina diaria de sus aburridas vidas cuando le pide que busquen a una moribunda estrella de rock a quien llamana como la persona que puedo haber salvado el rock nacional: Epigmenio Cruz. Además que su vecino los quiere matar ya que descubren que les roban la luz.

Visualmente se aleja de la modernidad. Está hecho en un bello blanco y negro y en formato 4:3. Históricamente nos sitúa en la huelga del CGH de la UNAM de 1999 - 2000, así que hay constantes referencias políticas.

Es una road movie que no necesita una carretera para contarse. El viaje es dentro de las calles de la Ciudad de México y Texcoco. Tiene un tono urbano que van desde sus diálogos hasta las locaciones. La ciudad se convierte en un escenario de oscio para 4 personajes frustrados víctimas de su propia zona de comfort. La búsqueda del músico se vuelve secundaria y lo más importante es el tiempo que tiene que tienen que matar para poder conseguir información. Tal vez los últimos minutos de la película sean los menos afortunados y el encuentro con Epigmenio Cruz tampoco resulta ser lo que hubiéramos esperado la mayoría.

Hay países que se caracterizan por manejar muy bien la comedia y México desgraciadamente no es uno de ellos. Güeros parece ser de esas excepciones, por sus realistas situaciones crear esa simpatía por los personajes y una búsqueda que nos parece absurda se convierte en una prioridad. Hay momentos surrealistas que a veces funcionan y a veces no. Aunque el chiste que rompe la cuarta pared cuando los personajes comentan que esta es una película pésima y aparece la claquete es una propuesta atrevida que no se hace mucho en el cine mexicano, pero al final no salió un buen resultado.

Para que este fórmula de comedia haya salido tan bien debemos de darle su mérito a los actores. Mientras otras comedias mexicanas intentan imitar la jerga mexicana de la peor manera posible, en Güeros parece que todo es naturalidad de los actores como si hubieran vivido en carne propia la huelga de la UNAM.

La fotografía es exquisita. Un grandioso trabajo del cinefotógrafo Damian García que usa constantes y bien elaborados planos secuencias y unos inserts que van más allá de complementar una escena. Buscan que los menos estético sea lo más bello y una gran variedad de lenguaje fotográfico haciendo de Güeros una película con una arriesgada propuesta fotográfica que termina siendo lo mejor de la película. Lo único negativo serían los contantes y exagerados desenfoques que resultan totalmente innecesarios ya que con el nivel de fotografía la película seguramente podemos ver cosas mejores.

Lo mejor: la fotografía, el humor, los diálogos, los personajes.

Lo peor: el desenlace, momentos demasiado aburridos.

Conclusión: Recomendable.