La tortuga roja // Reseña


Studio Ghibli quizo tomar otros rumbos luego del retiro de Hayao Miyazaki, así que hizo esta co-producción con otras casas productoras de animación de Europa; el resultado es la bella ópera prima del director Michaël Dudok de Wit, La tortuga roja.

La película es un poema en el que los versos son sustituidos por imágenes ya que no tiene diálogos, por lo cual, se convierte en una obra rica en simbolismos. Su interpretación es muy abierta, es inútil una discusión sobre qué significa cada elemento en ella porque ofrece tantas opciones con las que podemos detenernos y analizar qué intenta decirnos esta enigmática y hermosa película.

Podemos dar por hecho que la naturaleza es la clave para descifrar el universo que nos plantea. La historia es prácticamente es el paso del tiempo de un hombre después de naufragar en una isla y su inminente estadía en ella de por vida. En un inicio odia la isla y odia a la tortuga roja que no lo deja escapar, esta tortuga puede ser una representación de la naturaleza. El náufrago se termina enamorando de la naturaleza y sabe que debe respetarla si quiere sobrevivir. No le queda más opcion que enamorarse de ella; incluso llega a tener un hijo que representa la curiosidad del ser humano por lo desconocido. La vida en la isla de la tortuga roja se convierte en una diégesis que quiere hacer las paces entre el ser humano y la naturaleza.

El final es sumamente interesante. Es la parte más rara de toda la película, pero la que nos abre los ojos al ser humano al enseñarnos nuestro destino y el de la naturaleza, no somos nada a lado de ella pues ella siempre va a seguir su curso. Por supuesto todas las interpretaciones son diferentes y hay toda una lista  de teorías válidas del significado detrás de esta obra.

La animación es magistral. Se notan los pinceles de Studio Ghibli con la visión artística del director Michaël Dudok de Wit, quien solo había hecho cortometrajes animados. Sí hacemos un flashback de los trabajos anteriores del director ya podemos notar una animación hermosa y singular. Destacan los sentimientos, la vida y el entorno. En La tortuga roja se junta lo caricaturezco y lo realista, lo minimalista y lo barroco, la textura de la arena, la ropa, el agua, el bambú, todos son elementos importantes para contar este bello poema visual.

Lo mejor: los simbolismos, la animación, el concepto, el final.
Lo peor: no está hecha para gente que le gusta analizar películas.
Conclusión: Recomendable.

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